Vitamina K: El héroe silencioso de la salud cardiovascular Una de las preocupaciones de salud significativas asociadas con el uso de esteroides es el aumento del riesgo de enfermedad cardiovascular, derivado de un proceso conocido como calcificación vascular: el endurecimiento de las paredes de las arterias debido a la acumulación de calcio.
Aquí es donde la vitamina K juega un papel crucial y protector.
El papel de la vitamina K en la salud cardiovascular
La vitamina K es esencial para activar una proteína específica llamada proteína Gla de matriz (MGP). A través de un proceso llamado gamma-carboxilación, la vitamina K "activa" la MGP, que luego actúa como un potente inhibidor de la calcificación arterial. En términos más simples, ayuda a prevenir la deposición de calcio en los vasos sanguíneos, reduciendo así el riesgo de enfermedades cardíacas y arteriales.
Cómo optimizar su ingesta Para asegurarse de que está recibiendo suficiente vitamina K para apoyar este proceso vital, es importante:
Conozca sus fuentes: Consuma alimentos ricos en vitamina K, como verduras de hoja verde (espinacas, col rizada), brócoli y alimentos fermentados.
Apoye la salud intestinal: Los probióticos también son beneficiosos, ya que un microbioma intestinal saludable puede ayudar a producir y absorber la vitamina K, aumentando aún más los mecanismos de protección de su cuerpo.